Para las empresas pequeñas y medianas, las franquicias son una de las alternativas más atractivas para crecer. Con este modelo, pueden expandir su red de locales y aumentar su impacto en el mercado gracias al capital, talento y trabajo de otras personas. Y empezar a jugar en las grandes ligas de los negocios.
Pero franquiciar no es para todos. Para que este modelo funcione, es necesario que las compañías cumplan con ciertas condiciones: por ejemplo, que sus procesos de producción de bienes o servicios sean replicables y puedan enseñarse de manera sencilla a otras personas. En cambio, desarrollar una franquicia en la que todo dependa del talento o conocimientos de una sola persona no es una buena idea, y un buen ejemplo son los negocios creativos, como un estudio de diseño gráfico o una productora teatral.
Hay otras condiciones imprescindibles para crear una franquicia, y tienen que ver con la madurez de la compañía. Si tienes una empresa exitosa y estás pensando en adoptar este modelo de negocios, estas son las 5 señales de que está lista para encarar este desafío. Aquí te las compartimos.
1. Tu negocio es rentable
Para que tu franquicia sea atractiva, necesitas ofrecer al potencial franquiciatario información concreta sobre ventas, costos, márgenes de utilidad y crecimiento futuro del mercado. Aunque toda opción tiene un tiempo mínimo de recuperación de la inversión y una cuota de riesgo, está claro que nadie va a invertir para perder dinero.
2. La operación de la empresa está consolidada
Un negocio con menos de dos años de funcionamiento está generalmente en una etapa embrionaria, y seguramente sus dueños tendrán todavía mucho que aprender en materia de producción, atención al cliente, manejo de equipos y procesos administrativos. Si tienes una compañía establecida, procesos definidos y una experiencia acreditada de años en tu mercado, podrías estar listo para dar este paso.
3. Tienes el capital necesario
Aunque franquiciar permitirá que tu marca tenga más locales sin necesidad de que tú hagas esa inversión, debes saber que no es un proceso barato. Además de los honorarios de un consultor especializado, debes tener en cuenta otros costos, como los relacionados con el desarrollo de contratos y otros documentos legales, o los de un plan de marketing para promover la oportunidad de negocios entre potenciales franquiciatarios. Aprovecha la próxima Feria Internacional de Franquicias para conocer más sobre este modelo y hacer tus primeros contactos.
4. Cuentas con una marca atractiva
Se trata de uno de los principales activos de una empresa, y es importante que tenga no sólo un logo bonito y atractivo, sino también un mensaje poderoso para comunicar a la audiencia. Antes de salir a franquiciar, es imprescindible que revises las fortalezas y debilidades de tu marca, que hagas los ajustes necesarios a tiempo y que la tengas registrada.
5. El mercado tiene mucho por crecer en los próximos diez años
La relación entre un franquiciante y un franquiciatario deber ser de ganar-ganar. Y si vas a vender un oportunidad para emprender, necesitas contar con datos precisos sobre el crecimiento de tu sector en el corto, mediano y largo plazos. Ten en cuenta que en los negocios también hay muchas “modas”, los hábitos de consumo están cambiando muy rápidamente y una inversión no se recupera de un día para otro.
Ahora que tienes más herramientas para hacer un análisis para el siguiente paso de tu negocio, ¿estás listo para desarrollar una franquicia?
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