En Mi Propio Jefe hemos hablado muchas veces de la importancia de la innovación como factor para mejorar la operación de la empresa, su propuesta de valor y colocarse un paso por delante de la competencia. ¿Pero qué pasa con nuestros clientes? ¿Ellos son capaces de percibir nuestros esfuerzos por fortalecer nuestra posición en el mercado? ¿El mensaje de la innovación de marca es realmente un elemento con influencia sobre su decisión de compra?
La respuesta es sí, y está basada en varios estudios que prueban que cuando nuestra audiencia percibe a nuestra marca como innovadora, hay beneficios concretos en términos de marketing, ventas, ingresos y rentabilidad. Y son los siguientes.
Beneficio #1
Los consumidores no permanecen indiferentes ante un mensaje de innovación. Un estudio reveló que el 84% de los encuestados consideró como “muy importante” que las marcas que compran sean innovadoras, e inviertan en investigación y desarrollo. Especialmente cuando se trata de productos y servicios relacionados con el cuidado de la salud, la mejora de la imagen personal, la seguridad o el logro de objetivos profesionales o de negocios.
Beneficio #2
A las personas les gusta ser consideradas como “adelantadas” por sus pares. Esa es la razón por la que tantos consumidores estás dispuestos a pagar miles de pesos y a endeudarse por meses para adquirir el último smartphone del mercado. O a consumir suplementos alimenticios que cuestan el doble que el de una marca genérica. Un punto importante es que la gente no quiere arriesgarse y testar productos cuyos resultados no han sido claramente probados, así que es fundamental transmitir con claridad la veracidad de los beneficios promocionados.
Beneficio #3
La gente está dispuesta a pagar más por productos y servicios innovadores. Y esta regla no aplica solo a productos electrónicos, automóviles, medicamentos o cosméticos que prometen hacernos lucir como de 20 años otra vez. También funciona en el caso de alimentos, prendas de vestir deportivas, equipos para el hogar, seguros y servicios turísticos. La innovación no solo tiene un efecto “aspiracional”, sino que también brinda seguridad y confianza.
Beneficio #4
La relación con la marca se fortalece. La innovación también pasa por darle al cliente no solo un producto o servicio novedoso, sino por acompañar esa propuesta con una experiencia distinta de compra y consumo. Y claro, por una atención post-venta excepcional. Esas acciones no solo conectan de manera directa con el corazón de nuestra audiencia, sino que permiten iniciar una conversación basada en la cercanía, y construir un lazo mucho más fuerte en el largo plazo, en las que las decisiones de compra empiezan a tomarse de manera más natural.
Beneficio #5
La innovación significa una oportunidad para escuchar al cliente. A diferencia de lo que sucedía años atrás, definir un nuevo valor agregado para un producto, o reestructurar los procesos de producción ya no son tareas exclusivas de los dueños del negocio o los ejecutivos más importantes. Los consumidores de una marca pueden ser una fuente inagotable de ideas, sugerencias y propuestas novedosas, y hay que incluirlos en los procesos de innovación. Porque al fin y al cabo son ellos los que utilizan nuestros productos y servicios todos los días, y saben exactamente qué otras características o beneficios están necesitando.
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