Si ya estás desarrollando una estrategia para atraer más clientes a través de Internet, uno de los puntos que más debes cuidar es la imagen que está transmitiendo tu marca. Esto está definido por el contenido que se publica, y también por las interacciones con los seguidores, sus opiniones y las conversaciones que se generan alrededor de tu producto o servicio.
Se trata de un factor crítico para el éxito de cualquier plan de marketing digital, pero no todos los empresarios lo tienen en cuenta. La reputación o percepción pública de una marca es algo en lo que debemos trabajar en forma permanente, para evitar posibles crisis y también estar preparados para actuar en forma inteligente ante ellas.
Algunos consejos prácticos
Para empezar a trabajar en nuestra reputación online, el primer paso es verificar qué es lo que se está diciendo de nuestra marca en Internet. Una buena forma de hacerlo es revisar las conversaciones con nuestros seguidores en los últimos meses: ¿hubo alguna queja?, ¿la respuesta fue rápida?, ¿el cliente se quedó satisfecho con la solución brindada?.
También puedes hacer una investigación a través de los motores de búsqueda, ya sea por el nombre de la empresa, o los productos o servicios que ofrece. O hacer un monitoreo a través de herramientas más sofisticadas, como Social Mention o Buzzmonitor.
Luego, puedes aplicar algunos de los siguientes pasos, recomendados por los mejores expertos en marketing digital:
- Define los puntos más importantes de tu mensaje de marca: quién es tu público objetivo, qué tipo de información o contenidos son relevantes para él, y cuál será el tono de la comunicación.
- Genera y publica contenido que genere un valor real para tus seguidores y clientes. Es decir, que responda sus preguntas más frecuentes, que los ayude a solucionar problemas concretos, que los inspire y que, al final, logre que vean a tu marca como un aliado importante en su vida.
- Mantén actualizados todos los perfiles de la marca en las redes sociales. Principalmente, toda la información que describa tu oferta (¿qué vendes?), tu valor diferencial frente a la competencia, y los datos de contacto. ¡No pierdas ninguna oportunidad!
- Crea comunidad. Esto es fundamental para que la comunicación con tu audiencia sea cercana, cálida y genuina. Y para lograrlo, necesitas generar con regularidad acciones que le digan a tus clientes y seguidores que son importantes para ti, y que no los buscas solamente para venderles algo. Entre otras ideas, puedes armar grupos segmentados en Facebook según temas de interés, enviar newsletters semanales a bases segmentadas, u organizar eventos gratuitos de capacitación, presencial o en línea.
- Ten una presencia constante. Para generar una relación de confianza que fortalezca a tu marca en línea, tus seguidores necesitan saber que siempre vas a estar ahí para ellos. Para ello, publica de manera regular en tu blog, conversa con tus seguidores, y mantente atento a las quejas. Abrir perfiles en las redes sociales y luego abandonarlos por falta de tiempo es una pésima señal, así que trabaja solo con aquellas a las que puedas dedicar tiempo.
- Cuenta con un plan de contingencia bien detallado ante una posible crisis de reputación en redes sociales. Esto puede darse por una falla en la calidad de tu producto o servicio, o los comentarios negativos de clientes enojados. ¡Que no te agarren desprevenido!
Te recomendamos poner en práctica estas recomendaciones, ya que te ayudarán a cuidar tu marca en la web. ¿Cuáles de estas acciones haces con regularidad?, ¿cuáles te hace falta?
Síguenos en Facebook
Quizá también te interese…
Contenido relacionado:
- 6 aspectos de mala comunicación que afectan a tu marca
- 5 pecados de las relaciones públicas que pueden terminar con tu marca
- Cómo hacer una campaña de marketing móvil que te ayude a vender
Contenido recomendado: