Manejar un negocio sin tener acceso a capital fresco lo debilita y lo desprotege ante posibles crisis, como una recesión económica. Pero para entender la importancia de tener fondos disponibles también hay que tener en cuenta las buenas noticias, como un aumento súbito de la demanda.
Por eso, tener cuentas sanas no es suficiente cuando tenemos el propósito de crecer. Y es ahí cuando entendemos que el crédito, en la forma de deuda, es una herramienta fundamental para aprovechar las oportunidades que se presentan y hacer realidad todo proyecto de expansión.
¿Cuáles son las principales ventajas de acceder a un crédito? ¿Por qué una deuda bien manejada puede impulsar el crecimiento de tu empresa? Aquí te lo contamos.
#1. Mejora el perfil crediticio de la empresa
Cuando recién iniciamos un negocio es normal que recurramos a la tarjeta de crédito personal o a los créditos de consumo para adquirir computadoras, máquinas e insumos. Pero con el tiempo, lo más recomendable es contar con un plástico corporativo, para empezar a generar un buen historial crediticio y poder solicitar, cuando sea necesario, un préstamo a nombre de la empresa. También se recomienda cambiar la titularidad de servicios como la energía eléctrica o el agua de la oficina a nombre del negocio, y pagar los recibos a tiempo.
#2. Fortalece el ciclo productivo
Cuando el negocio va bien, e incrementan las ventas, podemos enfrentar problemas para satisfacer la demanda. Un ejemplo típico es la falta de fondos para adquirir insumos o nueva maquinaria, o para contratar más personal. Un crédito Pyme, tramitado a tiempo, te dará acceso a los recursos necesarios para fortalecer el ciclo productivo y cumplir a tiempo con los clientes.
#3. Permite aprovechar las oportunidades que se presentan
Con un acceso permanente al crédito podemos tomar ventaja frente a la competencia cuando aparece una buena oportunidad. Por ejemplo, la venta de maquinaria con un descuento especial o el remate de un local comercial. La recomendación de los expertos es no solicitar un crédito en el momento que se necesita, sino tramitarlos con tiempo para tener líneas abiertas disponibles.
#4. Puede reducir la carga impositiva
Una táctica común de estrategia fiscal es adelantar pagos del próximo año, como los servicios de una agencia de relaciones públicas o la compra de un equipo a cambio de un descuento. Ese costo será considerado al hacer el cierre fiscal, y puede significar una reducción significativa en el pago de IVA o ISR. Si no cuentas con los fondos necesarios puedes solicitar un préstamo, siempre a una tasa conveniente para que la estrategia no resulte más costosa al final.
#5. Genera beneficios a través de los programas de lealtad
Por último, antes de adquirir una tarjeta de crédito corporativa investiga cuál es el programa de beneficios que ofrece, elige el que más se adapte a la operación y necesidades de tu negocio. Por ejemplo, algunas tarjetas permiten reducir el saldo con puntos o intercambiar esos puntos por boletos de avión. Ten siempre en cuenta la tasa de interés y los cargos por pagos fuera de término, porque suelen ser bastante elevados.
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